*Reconciliación
*La Iglesia en manos de Lucero
*Legisladores VIP
En la población en general existe un sentimiento de temor e incertidumbre sobre el futuro del país. Andrés Manuel López Obrador y algunos de sus operadores como Ricardo Monreal Ávila y Manuel Camacho Solís, insisten en desconocer el Estado de Derecho y sus instituciones, a pesar de que sus quejas ya fueron rechazadas por el Tribunal Electoral. Existe intranquilidad porque quienes aún apoyan al Peje pudieran radicalizar sus acciones de protesta y meter al país en un túnel sin fondo, donde la violencia y la ingobernabilidad imperen.
El desasosiego social tiene fundamento por los graves hechos de violencia que se han registrado en las últimas horas en varias entidades de la República y la protesta postelectoral que después del fallo del Tribunal Electoral tiende a incrementarse en algunas entidades de la República como Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Tabasco y Michoacán, además del bastión del perredismo en que está convertido el Distrito Federal.
La mayoría de los mexicanos entendemos que vivimos un proceso electoral que nos dividió, principalmente por la manipulación mediática hacia dos de los candidatos presidenciales que mostraban proyectos políticos no sólo diferentes para el país, sino enfrentados uno con el otro. Sin embargo la competencia ya terminó y las instituciones de que está dotado nuestro sistema para calificar las elecciones: el IFE y el TRIFE, ya contaron los votos, decidieron validarlos y determinaron que Felipe Calderón es el ganador de las elecciones y quien debe convertirse en Presidente de México.
¿Que es lo que les queda tanto a Andrés Manuel López Obrador como a los otros tres candidatos presidenciales que perdieron y a sus seguidores?, solamente reconocer la elección. Aceptaron participar con las reglas del juego que existen; bajo esas pautas nadie ganó todo ni perdió todo. El PRD avanzó y es la segunda fuerza política en la Cámara de Diputados, un logro importante si consideramos que ese partido apenas tiene quince años de fundado.
Vale decir que quienes están manipulando e incitando a Andrés Manuel López Obrador a la aventura de la desobediencia institucional y posible violencia no son los perredistas, sino el grupo de políticos profesionales oportunistas de que se rodeo. Baste recordar que la estructura perredista fue marginada de la decisión de postular como candidato presidencial al Peje y fue ignorada durante la campaña política, al crearse una jerarquía alterna de apoyo, integrada en su mayoría por personas que no estaban identificadas con el PRD, pero que representaban liderazgos regionales.
Esa es la principal ventaja que tiene Felipe Calderón Hinojosa en su tarea de reconciliación para poder llegar a su toma de posesión con un ambiente político de paz en el país. El PRD, como partido, no es quien rechaza el triunfo del excandidato blanquiazul, quienes no aceptan su derrota y están retando al Estado son Andrés Manuel López Obrador y un grupo de prófugos tricolores, que como Manuel Camacho Solís, otra vez vuelven a fracasar.
El PRI fijó su postura llamando a las fuerzas políticas del país a respetar las instituciones, para que sea a través de éstas donde se encausen las ideas y se diriman los conflictos, y de esa manera se pueda corregir el deterioro político.
El grupo que apoya a López Obrador pide la renuncia de Calderón para iniciar el diálogo, sin embargo, los legisladores perredistas en las cámaras del Congreso de la Unión, comienzan a alcanzar acuerdos con los otros partidos políticos y a mostrar disposición para normalizar la vida política de México.
Felipe Calderón Hinojosa, una vez que recibió el reconocimiento de su triunfo, inició acercamiento con el PRI, Convergencia y Alianza Socialdemócrata. Los colaboradores cercanos, sobre todo Josefina Vázquez Mota y Juan Camilo Mouriño han comenzado a negociar la pacificación del país, en base a la cesión de posiciones en el próximo Gabinete Presidencial.
Es un hecho que poco a poco se irá disipando la incertidumbre y el temor que existe en la población sobre el futuro del país. El diálogo y la concertación existen y ese es el principal freno de la ingobernabilidad.
MURMULLOS
200 trabajadores se incorporan al Sindicato de la Condusef
José Manuel Castillo Hernández es apenas el segundo dirigente que tiene el Sindicato de Trabajadores en los cinco años que tiene de existencia. El trabajo que ha realizado al frente de la dirigencia le ha valido el reconocimiento de sus compañeros. Recientemente logró incorporar a las filas del sindicato a casi 200 trabajadores que aunque ocupaban puestos como chóferes o de nivel semejante, eran considerados trabajadores de confianza y se les negaban los derechos sindicales en el ámbito gubernamental. Sin enfrentamientos con los funcionarios de la Condusef que encabeza Oscar Levin Coppel y con una actitud honesta y de diálogo, Castillo Hernández, ha logrado importantes beneficios para sus representados. Es un buen elemento de la FSTSE que encabeza el diputado Joel Ayala Almeida.
Confrontados pero con las bolsas desenvainadas
Para Ripley. Tanto los diputados como los senadores todavía no se sentaban en sus cúrules y ya habían cobrado sus sueldos –dietas en lenguaje parlamentario-. Apenas llevaban cuatro días visitando Xicotencatl o San Lázaro y ya tenían: fuero constitucional; dinero en sus chequeras; boletos de avión; gente a su servicio; pase gratis en las autopistas; seguros de vida y disponibilidad de créditos, entre otras prestaciones. Luego por eso no entienden los problemas del pueblo, sean tricolores, azules, amarillos o del arcoiris. Todo en la bolsa y apenas empiezan. Mientras un importante número de mexicanos no tiene empleo o recibe ingresos que no le alcanzan para lo básico. Les aseguro que a muchos ya se les olvido que estaban apoyando a López Obrador o que su candidato fue Roberto Madrazo. Por lo menos deberían ser discretos. Por eso tienen tan mala imagen en el pueblo.
Los Elegidos
Son seis los personajes que conforman el equipo de transición de Felipe Calderón Hinojosa: al frente Josefina Vázquez Mota y Juan Camilo Mouriño; la exsecretaria de Sedesol en la interlocución con las fuerzas políticas; el campechano Mouriño en la coordinación general; Eduardo Sojo y Heriberto Félix Guerra como enlaces del área económica; así como César Nava y Germán Martínez, en cuestiones aún por definirse, pero relacionadas con la comunicación del Presidente Electo.
Primer Informe de Gobierno de Enrique Peña Nieto
El gobernador del Estado de México rindió su primer informe de gobierno. Un año de gobierno que en términos generales ha sido positivo para la entidad. Se avanzó sustancialmente en el cumplimiento de los compromisos de campaña y su equipo se consolidó. El llamado de Enrique Peña Nieto fue para iniciar la reconciliación nacional como única vía para la estabilidad y el progreso de México. Dejó en claro que la intolerancia enfrenta, divide y separa, mientras que a través del diálogo todos podemos ser escuchados. Pidió una actitud responsable, en esta hora, a todos los actores y fuerzas políticas del país. Testificaron el Primer Informe de Enrique peña Nieto, los dirigentes nacionales del PRI, el PAN y el PVEM; los integrantes de la LV Legislatura del Estado de México y los exgobernadores de la entidad.
Nuevo Líder de la Coparmex
Ricardo González Sada, proveniente de la compañía embotelladora FEMSA, será el nuevo presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) y ocupará la dirigencia de esa agrupación empresarial hasta el 2008. La estafeta la recibirá a finales de octubre próximo de manos de Alberto Núñez Esteva, quien concluye su liderazgo, en el marco de un encuentro empresarial que se realizará en Mérida, Yucatán. En sus primeras declaraciones, Ricardo González Sada, demandó al Presidente Electo, Felipe Calderón que gobierne con firmeza en estricto apego al Estado de Derecho y de respeto a las instituciones para evitar situaciones que violenten proyectos o intranquilicen a la sociedad; en específico se refirió a los casos Atenco, Oaxaca y Reforma.
Misterio: ¿La Iglesia en manos de Martín Lucero?
Inexplicablemente desde las entrañas del Lópezobradorismo –sólo recordemos que una de las figuras principales ahí es Manuel Camacho Solís- surge la idea de que la factura que pasará la maestra Elba Esther Gordillo a Felipe Calderón por sus valiosos servicios en la consolidación de la democracia mexicana, será que le otorgue la titularidad de la Secretaría de Educación Pública. ¿Será que la están candidateando, quien sabe con que interés?. Sólo que sea para que Manuel Camacho y los otros pejistas derrotados, en el futuro puedan argumentar que la educación es un desastre, porque se puso la iglesia en manos de Lutero. O será que esos mañosos, lo hicieron para quemar la imagen de la maestra, en un intento por sacarla de la jugada, ante el temor que le profesan. Manuel Camacho fue uno de sus principales aliados e impulsores para que llegara a la dirigencia de la SNTE a finales de los años ochenta y ahora, cuando los dos disparan desde bandos diferentes, se convierte en su principal promotor mediático para que la maestra ocupe la SEP, ¿Qué pretenden los pejistas?. Hay que esperar.
Por: Juan Jacobo Cázares G.
www.barahundapolitica.com.mx
jacobo_cazares@yahoo.com.mx
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