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Sol, encantador pero peligroso especialmente para tu hijo
Los pequeños pasan la mayor parte de su tiempo bajo el sol y su delicada piel se encuentra en un proceso de maduración en el cual todavía no desarrolla al 100% su capacidad de adaptación y protección.
La radiación solar es especialmente perjudicial para los niños, que siempre deberían estar protegidos de los rayos solares directos. Los daños de la piel en el niño van desde una quemadura solar: como urticaria (ronchitas), hasta provocar a largo plazo: manchas, envejecimiento prematuro y lo más grave, cáncer de piel.
El cáncer provocado por el sol es una enfermedad lenta y las primeras alteraciones del ADN de las células propias de la piel, se producen a edad temprana.
Tips para proteger a tu pequeño:
- Protección al sol obligatoria desde la infancia
- Evitar la exposición solar de las 10 de la mañana a las 3 de la tarde
- Tomar en cuenta el tipo de piel, actividad y lugar.
- Los días nublados también pueden ocasionar daños en la piel y la gravedad es la misma.
- No olvidar aplicarlo en orejas, cuello, empeine, manos.
El Doctor Rodrigo Gutiérrez Bravo, Dermato – Oncólogo del Hospital Ángeles, comenta que debido a la falta de información solar, se cree que a los niños no se les debe aplicar un protector solar, pero no es verdad, ya que la radiación solar es acumulativa en la piel, provocando que el mayor porcentaje de daño solar se reciba durante los primeros 18 años de vida, esto ha causado que el cáncer de piel se presente en edades tempranas. Es por eso que es muy importante proteger a nuestros hijos con un filtro solar de buena calidad. Hoy en día existen protectores específicos para la piel delicada de los niños, de fácil aplicación y estéticamente agradables como lo es el caso de ECLIPSOL Baby y ECLIPSOL Kids, indicado para la prevención de lesiones en la piel derivadas de la exposición a la radiación ultravioleta, específicamente las radiaciones ultravioleta A y B.
Es necesario tener especial cuidado con niños de piel clara generalmente asociado a pelo claro y/o ojos claros, ya que tienen menos cantidad de pigmento natural (melanina).
Por otro lado, es necesario evitar la exposición directa a la luz del sol y por tiempo prolongado en niños menores de 6 meses y a partir de ésta edad se recomienda utilizar un protector solar especialmente cuando los niños realicen actividades al aire libre, aún en días nublados y reaplicarlo cada dos horas siempre sobre la piel seca. En caso de que su hijo sufra una quemadura solar, evite el uso de remedios caseros y acuda con un especialista para su revisión y tratamiento.
Eclipsol, de Laboratorios Darier, es elaborado con la más alta calidad, que permite un óptimo nivel de protección para cada tipo de piel, actividad y necesidades de las personas, es importante su aplicación diaria para evitar daños futuros.
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